Renacentista interior de San Lorenzo de Úbeda; Foto Asociación Cultural Amigos de San Lorenzo |
Plaza Vieja apoya el movimiento que pide la rehabilitación de San Lorenzo
DOMINGO, 29 DE JULIO DE 2012 14:52 ALBERTO ROMÁN VÍLCHEZ
La Asociación Plaza Vieja en defensa de Úbeda, Patrimonio de la Humanidad, ha mostrado su apoyo al movimiento ciudadano generado para reivindicar la rehabilitación de la iglesia de San Lorenzo. El colectivo ha manifestado que respaldará todas las acciones que se emprendan para conseguir que este edificio sea propiedad de Úbeda y pueda ser utilizado por todos, ya que «la Iglesia ha demostrado su incapacidad o su poca disponibilidad para mantenerlo como es preceptivo».
Plaza Vieja recuerda que en su documento 'La ciudad que queremos', entregado a todos los partidos políticos que se presentaron a las últimas elecciones municipales, ya mostraban su postura respecto al importante patrimonio de la Iglesia Católica, con numerosas propiedades urbanas acumuladas a lo largo de los siglos. En su opinión, como dueña o depositaria de este rico patrimonio, la Iglesia debe hacer frente a importantes gastos de rehabilitación y de mantenimiento ordinario, que no siempre acomete, por lo que la mayoría de las veces se da el caso de que el peso de la restauración y conservación de dichos bienes eclesiásticos recae sobre diferentes programas nacionales y autonómicos ejecutados por las administraciones públicas y privadas.
En Úbeda, como ejemplo, ponen las ingentes cantidades que tanto el Ministerio de Cultura del Gobierno central, en su día, como la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, han venido destinando a la reconstrucción, «con mayor o menor fortuna», de la colegiata de Santa María.
«El Cabildo, su propietario, debería colaborar, al menos en una pequeña parte, en la conservación de estos bienes patrimoniales», afirman, pues iglesias como la de San Pedro, Santo Domingo y, especialmente, San Lorenzo, muestran un mal estado de conservación generalizado y «están pidiendo a gritos una urgente actuación so pena de que nos convirtamos en testigos de su irreversible deterioro o, en el peor de los casos, de su desaparición».
Pendiente de restauración según el PEPCH
Desde Plaza Vieja recuerdan que el Plan Especial de Protección del Casco Histórico (PEPCH) refleja desde hace muchos años como pendiente «la restauración de la iglesia de San Lorenzo y algunos lienzos o paños de muralla», e incluye este edificio dentro del programa de «expropiación y adecuación de edificios históricos para uso dotacional», insistiendo en su necesaria restauración. También el formulario de la declaración de Úbeda y Baeza como ciudades Patrimonio Mundial reitera su uso dotacional. El Ayuntamiento efectuó una oferta de permuta de esta iglesia al Obispado de Jaén y, para evitar males mayores, restauró la muralla que soporta este templo con fondos públicos provenientes del Plan E.
Desde la asociación piensan que esta singular iglesia debe pertenecer a todos los ubetenses a corto plazo, para lo cual «las negociaciones entre el alcalde de Úbeda y el obispo de Jaén deben culminar cuanto antes». Y puesto que se va a utilizar el dinero de todos los contribuyentes (católicos y no católicos), «todos los ubetenses debemos ser los beneficiarios últimos de su puesta en funcionamiento como lugar de cultura en la forma de centro de interpretación de la obra de Antonio Muñoz Molina», proponen desde Plaza Vieja.
Una dejadez que tuvo 'premio'
Así reiteran que su posición es clara en este sentido. Tanto que en 2010 galardonaron al Obispado de Jaén con el premio negativo 'León de Chocolate' «por el deficiente mantenimiento de los edificios de su propiedad, cuyo mal estado de conservación está demandando una urgente actuación que venga a frenar su manifiesto deterioro». Entonces destacaron además que este escaso nivel de atención se ponía de manifiesto «en el lamentable estado de la iglesia de San Lorenzo, en cuyas obras se ha procedido a talar la hiedra que había llegado a formar parte de la imagen de esta emblemática iglesia».
La asociación piensa que el Cabildo debe contribuir bastante más de lo que viene haciéndolo en tareas de mantenimiento y conservación de su patrimonio para, de ese modo, asegurarse de que el estado de sus iglesias y demás edificios en una ciudad Patrimonio Mundial no desmerezca del resto de edificaciones que integran el legado monumental de Úbeda.
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