Juan Ángel López
Barrionuevo
Cada 13 de diciembre
se celebra el día de Santa Lucía, una mártir cristiana nacida en el año 283 en
Siracusa (actualmente una ciudad italiana que pertenecía a la provincia romana
de Sicilia) y que falleció muy joven, con apenas 21 años, en el año 304.
El martirio que padeció durante la persecución de Diocleciano tiene
que ver con su consagración como patrona de los ciegos (es común el dicho 'Que
Santa Lucía te conserve la vista') y en la actualidad es venerada en la Iglesia
católica, ortodoxa y luterana.
Lucía era de padres
nobles y ricos, hija de Eutiquia y de un padre cuyo nombre se desconoce pero
que probablemente sería Lucio, dada la costumbre romana de poner a las hijas el
nombre del padre. Educada en la fe cristiana, Lucía consagró su vida a Dios
e hizo un voto de virginidad.
Según cuentan su madre
estaba muy enferma y quiso, antes de morir, que su hija se casara con un joven
pagano. Lucía la persuadió para que fuese a rezar a la tumba de Águeda de
Catania a fin de curar su enfermedad y Eutiquia sanó. Lucía le pidió que la
liberara del compromiso, le dejara consagrar su vida a Dios y donara su fortuna
a los más pobres y su madre accedió. Pero su pretendiente, despechado, la
acusó ante el procónsul Pascasio porque sabía que era cristiana, en tiempos del
emperador Diocleciano, lo que desencadenó su persecución.
El martirio de Lucía
El martirio de Lucía no
está atestiguado por fuentes contemporáneas o inmediatamente posteriores a la
persecución de Diocleciano, sino por relatos hagiográficos, que cuentan que
cuando Lucía fue arrestada bajo la acusación de ser una cristiana, Pascasio le
ordenó que hiciera sacrificios a los dioses. Entonces Lucía dijo: «Sacrificio
puro delante de Dios es visitar a las viudas, los huérfanos y los peregrinos
que pagan en la angustia y en la necesidad, y ya es el tercer año que me
ofrecen sacrificios a Dios en Jesucristo entregando todos mis bienes.» Irritado
Pascasio, ordenó a sus soldados a que la llevaran a un prostíbulo para que
la violaran y luego se dirigió a Lucía diciéndole: «Te llevaré a un lugar
de perdición así se alejará el Espíritu Santo».
Los soldados la tomaron
para llevársela, la ataron con cuerdas en las manos y en los pies,
pero por más que se esforzaban no podían moverla: la muchacha permanecía rígida
como una roca. Al enterarse de lo sucedido, Pascasio ordenó someterla a
suplicio con aceite y pez hirviendo, pero no logró hacerla desistir.
Condenada a ser martirizada, antes de morir profetizó su canonización y su
patronazgo como protectora de Siracusa, junto con la caída de Diocleciano y
Maximiano.
En España el 13 de
diciembre se celebra el día de modistas y sastres, que se celebra en su ermita
en Valencia
El relato griego —que
data del siglo V— y el relato latino —datado del siglo VI al VII— son idénticos
en lo fundamental, aunque difieren en algunos detalles finales: según el
martiryon griego Lucía fue ciega, en tanto que según la passio latina, fue
martirizada y le sacaron los ojos.
Por este motivo, Santa
Lucía es la patrona de la vista. Pero no es el único argumento que se ha
utilizado. La relación entre Lucía y los ojos, que hace de esta santa la
protectora de la vista, deriva quizá de la cercanía etimológica del nombre
griego «Lucía» con el término latino lux (luz). Existe la leyenda de
que fue la belleza de los ojos de Lucía la que no permitía descansar
a uno de sus pretendientes, por lo que ella se los arrancó y se los
envió. Lleno de remordimiento e impresionado por el valor de Lucía, el
pretendiente se convirtió al cristianismo.Una leyenda medieval decía que,
cuando Lucía estaba en el tribunal, aun sin ojos, seguía viendo, según recoge
la wikipedia.
Es patrona de los pobres,
los ciegos, de los niños enfermos y de las ciudades, pero también de los
campesinos, electricistas, modistas, chóferes, fotógrafos, afiladores,
cortadores, cristaleros, sastres, fontaneros y escritores. De hecho, en España
el 13 de diciembre se celebra el día de modistas y sastres, que se celebra en
su ermita en Valencia.
Es patrona de un conjunto
de localidades:
Siracusa en Italia.
Venecia en Italia.
Zacatecoluca en El
Salvador.
El Divisadero en el
departamento de Morazán, en El Salvador.
Santalla de Rei en
España.
Moche en Perú. Fundado en
1534 como Santa Lucía de Moche.6
Mossoró en Brasil.
Santa Lucía del Tuy en
Venezuela.
Santa Lucía, en el
departamento de Canelones, Uruguay. Es además sede del municipio homónimo.
Santa Lucía Utatlán,
Sololá; Santa Lucía Cotzumalguapa (Escuintla); y Santa Lucía Milpas Altas
(Sacatepéquez), en Guatemala.
Santa Lucía en el
departamento homónimo, provincia de San Juan, en Argentina. Allí se celebra la
Fiesta Nacional de Santa Lucía.7
Santa Lucía de Tirajana
(Gran Canaria) Islas Canarias en España.
Hacinas, en la provincia
de Burgos, España.
As Teixugueiras, Concello
de Cartelle, provincia de Ourense, Galicia
Las
Capillas De Santa Lucía En San Millán.
Por último, nos cuenta Ginés Torres Navarrete[1] “…Sobre el arco o junto a él, en la
Puerta de Ibiut, razón por la que también se le conoció por Puerta de Santa
Lucía, intramuros, se labró Dios sabe cuándo una hornacina dedicada a la
abogada de la vista. Esta desapareció en 1865 al ser derribada lo que de dicha
puerta quedaba…”
Es de opinar, que la imagen pasara a la ya existente Capilla de Santa Lucia de
San Millán. Dónde la imagen fue destruida en 1936; con el resto del patrimonio
mobiliario que poseía la iglesia.
El templo a lo largo del tiempo ha poseído dos capillas dedicadas a Santa
Lucía. La primera se situaba colateral al acceso de la Sacristía. Y sabemos por
Ginés Torres: “…éste de Santa Lucía es la misma que la de San Cristóbal,
entierro igualmente de los Moya. En el mismo altar debieron de venerarse ambas
imágenes…”. Ruiz Prieto, nos dice acerca de esta Capilla “había restos de una
nave donde estaba la Capilla de santa lucía y el altar de Ntra. Sra. de las
Mercedes. Se tapizaron no hace muchos años los arcos…, y la imagen de Santa
Lucía se mudó a la primera Capilla del lado de la Epístola… Colateral a la
segunda puerta de entrada á la iglesia… fue antiguo baptisterio…”[2]
Con este escrito, podemos teorizar que la actual capilla de Santa Lucía[7], fue su nave tapiada a finales del siglo
XIX, para así colocar el altar y la imagen de la santa. Así mismo durante
Agosto de 2005; la cofradía restauró la aludida capilla, abriendo la nave de la
antigua capilla bautismal, restaurando la bóveda, el arco; etc.… etc.…
[1] Ruiz
Prieto, Historia de Úbeda; pág. 83 Historia Eclesiástica.
[2] Antigua capilla del baptisterio, cuya
pila bautismal de mármol del siglo XVI, con heráldica del prelado que la
costeó, el obispo Francisco de Mendoza.
Fuente: Wikipedia
No hay comentarios:
Publicar un comentario