6 ago 2012

¡Dios mío por qué me has abandonado...! Exclamó la Iglesia de San Lorenzo de Úbeda.

Foto de Javier Cacho Sanz  Úbeda Iglesia de San Lorenzo




¡Dios mío por qué me has abandonado...! Exclamó la Iglesia de San Lorenzo de Úbeda.

Juan Ángel López Barrionuevo.

No conseguiré entender por que un número considerable de iglesias y ermitas de nuestros pueblos y ciudades han sido abandonadas de la mano de unos (la iglesia ) y de otros (las instituciones). Alguien me puede decir que es un problema estrictamente eclesial, y puede tener razón, pero ante la desidia y su ineficacia, está el Estado que con sus instituciones competentes debe salvaguardar estos monumentos sencillos, muchos, y de valor, otros. Son en su mayoría pequeñas iglesias de fábrica sencilla, espadaña y ábside de sillar labrado y el resto de mampostería. Algunas con elementos decorativos en su puertas de acceso, vanos y ábside, quizás reaprovechados de otras más antiguas. Su valor sentimental, puede en algunos casos primar al arquitectónico. Nos encontramos estos casos, principalmente, en pueblos abandonados, en los escasamente poblados, o en ciudades con un rico patrimonio arquitectónico . 

Para conservar estos edificios solamente habría que haber mantenido y mantener en buenas condiciones su tejados, en la mayoría de los casos. Con seguir que estas singulares edificaciones sigan en pie, es enriquecer el patrimonio de nuestros pueblos y país. Visitar estas Iglesias, aún con sus paredes desnudas pero erguidas, reconfortaría al viajero y al lugareño.

Otro grave problema que se suma al abandono y mantenimiento del rico legado patrimonial de nuestro país, es la actual crisis económica que pone en serio riesgo la conservación del citado patrimonio artístico e histórico.Las causas naturales como la humedad y económica como la falta de fondos para financiar las labores de mantenimiento están provocando que más de 400 construcciones del Patrimonio español corran el riesgo de empeorar su conservación e, incluso, desaparecer.

Pero esto no quita que poblaciones como Úbeda, con un rico legado monumental, que se han movilizado los propios vecinos creando una plataforma a través de las redes sociales, para recuperar su olvidada iglesia de San Lorenzo. Labor encomiable, digan de aplaudir e imitar, ante la pasividad de las instituciones de ambos estados, el religioso y el laico.

Los ciudadanos de Úbeda, somos privilegiados al tener la suerte de vivir en una ciudad con un rico patrimonio histórico-artístico, que nos dejaron nuestros antepasados y que debemos mimar para que llegue en perfectas condiciones a las futuras generaciones. Y por esta causa se ha creado la plataforma ciudadana, a través de la redes sociales, llamada Salvemos San Lorenzo.

Desde el 3 de Julio de 2003, y tras el nombramiento de de Úbeda y Baeza como Patrimonio de la Humanidad; los ciudadanos sobre todo los amantes de las tradiciones de ambas ciudades, sentimos la bella tarea de dar verdadero ejemplo en el cuidado y mantenimiento de las mismas y quienes nos visiten, puedan dar fe de que este titulo hace honor a estas dos ciudades.Ahora luchamos, por la recuperación y puesta en valor de la iglesia de San Lorenzo.

San Lorenzo, es un bello ejemplo del renacimiento ubetense,  es además la historia de muchos años de Úbeda, y es un claro ejemplo de abandono y ruina, del que presenta el conjunto histórico de la ciudad de los cerros, entre otros de sus muchos elementos patrimoniales, como la Torre de la Iglesia de San Millán, La Iglesia de San Pedro y Madre de Dios del Campo, en cuanto a bienes religiosos y si nos referimos a los bienes civiles, un elemento patrimonial importante y abandonado es el Palacio de Francisco de los Cobos.

No sé porqué, la abandonada iglesia de San Lorenzo tiene un aliciente extra y atrayente en el amplio abanico de patrimonio religioso que podemos encontrar en Úbeda, este templo, que un buen día perdió su condición sacra y en los que el olor a incienso se tornó en olor a humedad y moho, y en los que la sensación de paz y calma que un día transmitieran a sus feligreses se transformó en desasosiego e incertidumbre para los pocos que se adentran en ella, retratando los ecos de rezos y plegarias de antaño.

Y mientras tanto, la ubetense Iglesia de San Lorenzo exclama,.. ¡Dios mío por qué me has abandonado...!

No hay comentarios: